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Mensaje del 02 de Mayo de 2004

Adoro la palabra confianza, ¿se habían dado cuenta ustedes que Yo adoraba la palabra confianza?, confianza, fiarse juntos, dichoso el ser que me tiene confianza ¿mmm?, porque todo es posible.

Mensaje del 02 de Mayo de 2004

Habla Artemio:

Hoy es tanto como 02 de Mayo de 2004, ya el mes cinco, el mes que viene es mitad de año, bueno, muy bien, vamos a ver que nos dice Jesús hoy.

Dice el Señor:

Te gustó todo lo que te dicté porque, y como vos decías: si se hace Mi voluntad también en esto se hace Mi voluntad, Yo tengo que hablar porque tiene que quedar el Mensaje grabado pero en una de esas otra vez grabas, si Yo te indico, grabas lo que decís antes porque es Mi Mensaje también, porque Mi querido entendelo otra vez más, vos no abris la boca sino es que Yo te la hago abrir ¿mmm?, no es porque Yo te haya quitado libertad sino porque vos te ofreciste, esto te lo digo hace diez años ya, pero siempre conviene recordarlo por los que están pensando y los que están asistiendo a una reunión.

Ahora, sinceramente Yo te digo estas no son reuniones, esto se llama un pedazo de Cielo en la Tierra, un pedazo de Cielo en medio de la pampa gringa, sí señor, eso es, qué reuniones ni ocho cuarto, esto es un pedazo del Cielo porque aquí estoy Yo, Mi Mamá, los Santos y familiares y todos los que ustedes quieran, qué vamos hablar de reunión, noo Mis queridos, alguna vez habrá que tomar conciencia y comunicarlo: noo, nosotros no hacemos reuniones tendrían que decir, nosotros directamente se nos abre el Cielo, esa dimensión que es el Cielo y estamos durante un tiempo determinado en el Cielo, como un anticipo de lo que va a pasar al fin de la vida de cada uno y al fin de los tiempos, es así de simple.

Que hermoso si lo entendieran todos esto porque habría muchos que tratarían de no perderse ¿eh?, un pedazo de Cielo, me acuerdo que hace tantísimos años vos usabas ese tema: pedacito de Cielo y te gustaba tanto y te daba un resultado bárbaro cuando lo usabas en la Escuela, también lo usaste en perfeccionamiento docente, era algo que el pedacito de Cielo abría las conciencias, mirá vos y ese pedacito de Cielo fue un anticipo de este pedacito de Cielo.

Mi querido, nada es porque sí, nada, nada y vos y todos los hombres tengan en cuenta que todo lo que se desea de veras y sinceramente uno lo va a tener, temprano o tarde, pero lo va a tener, todo. Repito, todo aquello que es honesto y bueno y a uno le conviene, es decir le viene bien, por más que sea enorme, terrible, grande, siempre va a tener, es cuestión de tener un poquito de paciencia, a veces un poquito, a veces un poquito más pero soy el único en el cual uno puede fiarse. La Sagrada Escritura dice: “pobre del hombre que confía en el hombre”, y es cierto, porque a veces las amistades no duran tanto, los compañerismos no duran eternamente… (se dio vuelta la cinta) …, la gente falla, pero del único que pueden fiarse es de Mi, por eso Yo adoro la palabra confianza, ¿por qué?, porque la palabra confianza quiere decir: con junto, fianza, confiar, confiar juntos. Adoro la palabra confianza, ¿se habían dado cuenta ustedes que Yo adoraba la palabra confianza?, confianza, fiarse juntos, dichoso el ser que me tiene confianza ¿mmm?, porque todo es posible.

Yo no aconsejaría a veces tanta confianza entre los hombres, sí, hay que tenerla porque sino no podríamos dar un paso, no podríamos vivir, no, pero siempre con cierta reserva o permitiéndole a la otra parte que tenga sus altibajos en ese planteo de la confianza. Adoro la palabra confianza, porque es algo entre la creatura y el Creador, entre el hombre y Yo, así de simple y así de terriblemente grande.

Confianza, fiarse junto, ¿qué querría decir esto?: sé que el Señor no me va a defraudar, a lo mejor no es por el camino de que el hombre lo ve, es por otro, no sabemos, a veces puede ser de otra forma, con otras características, pero de algo estén seguros, siempre es mucho más de lo que el hombre piensa, mucho mejor de lo que el hombre piensa. Miren, en este día 02 de Mayo, Yo les digo algo que nunca les había dicho, que adoro la palabra confianza ¿mmm?, fíjense que la palabra esperanza es maravillosa también y la adoro pero esperanza es esperar lo que todavía no es, entonces hay como un salto al vacío ¿verdad?, sí, y pero en el caso de la confianza es la fianza entre dos, es decir vos creatura, Yo Creador hacemos un pacto en el cual Yo no puedo fallar ni vos tampoco y cuando en ese pacto ninguno de los dos falla se da todo, así de simple y así de terrible y de maravilloso y así de tremendo para quien no lo entiende.

Pero escúchenme los seres humanos che, escúchenme un poco, ustedes creen por ventura que el que ordenó todos los astros en sus órbitas, separó las aguas de la tierra, la oscuridad de la luz, puso plantas tropicales donde hace más calor y plantas serófilas donde no hay humedad, quien hizo todo tan, tan maravillosamente bien, Mis queridos ¿se va a arrugar en la confianza?, no es siempre mas chico en proporción la confianza que toda la creación y en toda la creación que Yo sepa, Mi Papá y Yo, que estaba dentro de Mi Papá, no falló nada, después los hombres viste, estos muchachos que se juntan con malas compañías y que se yo han estropeado muchas cosas pero, hay que reconocer que Mi Papá y Yo dentro de Él, con el Espíritu Santo también por supuesto, hicimos todo bien, con orden, el hombre se encargó después de estropear muchas cosas pero ¿para qué vengo Yo acá, a la pampa gringa al comenzar el Tercer Milenio?, primero haciendo un acto de confianza con vos porque vos creíste que esto era posible, porque vos soñaste un mundo nuevo y, pero soñaste que podías hacerlo con tus fuerzas, ayudado por, Yo, todo, por supuesto ayudado por Mi pero como dije antes: siempre lo que Yo digo es, lo que Yo hago es superior a lo que un hombre piensa y no solamente Yo te dejé con tus propias fuerzas sino que vine un día y te dije: muchacho juntos ¿mmm?, vos esperabas que con tus fuercitas ibas a modificar tantas cosas sobre la Tierra y un día el Señor en persona te dijo: muchacho, aquí empieza un mundo nuevo, donde todo va a ser diferente, vos sos el primero Mi querido para asegurar lo que es la confianza, fiarse del Señor, con junto ¿eh?.

Estaba clarísimo, el mundo tiene que cambiar pero las aulas quedaban muy chiquititas y era pequeñito el mundo tuyo, entonces un día se aparece el Señor y te dice: ¡ahhh!, vos creías esto, vos tuviste confianza pues bien, ¡hartate de toda la confianza que tuviste porque ahora vas a tener motivos para hartarte!, en el buen sentido hartarte.

Mirá lo que te vengo a decir hoy, bueno Yo no tengo días para decir, cualquier día puedo decir, pero venía a cuento aquello de que cuando uno confía siempre lo que le da el Señor es mucho mayor de lo que el hombre espera, qué preciosura ¿no?, siempre es más grande que lo que uno está esperando. Vos Mi querido confiabas en tus propias fuerzas y por supuesto, sabías que eran limitadas, que algo ibas a hacer, está bien, pero de repente un día dijo: no, está bien, vos ya probaste tus fuerzas ahora mirá que pasa con las fuerzas del Señor ¿eh?, entonces ¿qué ocurre?, se abre el mundo del milagro ¿mmm? y vos hacías pequeñas cositas lindas, está bien, pero de repente viste que con el Señor las cosas podían girar ciento ochenta grados o varias veces ciento ochenta grados.

Y esto que digo para con vos lo digo para cualquiera: es una cuestión de confianza y no mirés la hora, no te ofendas pero los tiempos los manejo Yo.

Habla Artemio:

Está bien.

Dice el Señor:

Hace falta recordar que esperanza es esperar lo que aún no es y siempre es un salto al vacío abandonándose en el amor, esta bien, pero confianza es mucho más grande porque es la fianza entre dos, esto no puede ser pero si el Señor dice que sí puede ser, va a ser.

Piensen Mis queridos todas estas cosas, piénsenlas, ustedes creen que esperé tanto tiempo en que se, para que se encontraran esos documentos en Egipto, fue en el momento justo ¿eh?, ni más ni menos, ¿todo eso es la solución?, no, no, no, todo eso tiene muchas cosas buenas y sobre todo lo mucho de bueno que tiene es que aquellos que están tan seguros dentro de sus esquemas y sus estructuras y sus cosas hechas Yo les digo no, así no, ustedes elaboren todo lo que quieran pero en nombre del Señor no, en nombre propio, porque a Mi me basta una cabra, esto lo dijeron ya, a Mi me basta una cabra, una cueva y vasijas conteniendo documentos, más que montones de instituciones que se atribuyeron todas las posibilidades, ¿y?, contenedores, documentos, miles de años ¿mmm?, dos milenios casi y de repente toda la Luz.

Por eso, hay que edificar con el Señor porque sino uno desparrama, por eso hay que mirar las cosas a través del ojo del Señor, ¿y por qué, porque Yo soy un dictador?, noo, porque soy el Padre, ustedes son Mis creaturas y lo menos que puede pasar es que haya armonía entre los hijos y su Creador ¿mmm?, no porque sea alguien que quiere imponer su voluntad, noo, detrás de todo esto hay un Padre amoroso que quiere para sus hijos la felicidad.

Así de simple y así de terrible todo, hoy me parece que he revelado montones de cosas, sobre todo para los que quieren leer entre líneas pero también hay un Mensaje directo y concreto ¿no?.

Pobre las estrellas que desaparecen cuando sale el sol, esa lección debería aprenderse siempre, aunque las estrellas tienen su luz pero el sol tiene mucho más, parecería que tiene toda la Luz, no se olviden nunca, toda la Luz y a esa Luz deben aspirar.

Amén.

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