Mensaje del 17 de Agosto de 2003

Habla Artemio:

Hoy es 17 de Agosto de 2003.

Dice Jesús:

Para los que tienen dudas de que Yo estoy usando la voz de este hijo para hablar, puede cerciorarse después escuchando las grabaciones y viendo que está Mi voz que le dicta a Artemio lo que está diciendo.

Bueno, parece como si Artemio les adelantó algo ya de lo que traía Yo entre manos, sí, en una Carta Pablo dice: “que Yo soy locura para los judíos y estupidez para los que no creen en Mi”, ustedes se pusieron a pensar ¿qué es esto, de que San Pablo diga que Yo soy locura para algunos y estupidez para otros?, alguno, ya que esto va hacia los cuatro puntos cardinales, ¿se siente aludido?, ¿cree que Yo estoy loco o todo esto es una estupidez?, a veces conviene revisar porque uno nunca sabe como le influyeron, los cuentos que le metieron y tantas cosas. Pero Mis queridos, hay una realidad, Yo soy locura, ¿y qué querrá decir esto?, y muy simple, que quien me sigue para los demás no está muy bien de la cabeza ¿no?, porque es posible que haga cosa que resultan un poco ridículas para los demás. El simple y maravilloso grito de recién de que me aman, si lo escucharan alguien que está…, no sé en donde, diría: realmente están locos. Pablo dice: “es locura para los judíos y estupidez para los que no creen en Él”.

Así es Mis queridos, pero me parece que también soy locura y estupidez para los que creen en Mi, digo, no sé, y que Yo sepa ya tiene dos mil años aquella expresión que dice: “les dejo un mandamiento nuevo, que se amen unos a otros como Yo los he amado”, hace dos mil años ¿no? y piensen un poquito, mejoró mucho cómo se mira a la mujer, a través de los Siglos, teniendo en cuenta todo lo que se arrastra de las culturas que influenciaron el Cristianismo?, porque Yo elevé a Mi Madre que es una mujer a la condición de Co Redentora conmigo, todos debieron darse por aludidos que si Yo nombro a Mi Madre, una mujer Co Redentora, estoy rompiendo de un mazazo todos los conceptos anteriores de la mujer.

Sigo enumerando las cosas que me apenan, atendiendo a una expresión de Artemio: todavía no veo que haya muchas legislaciones que apoyen y asimilen plenamente a todos los discapacitados en los empleos dignos, algo que puedan hacer por supuesto. Cuando Yo digo esto pienso que los que voy nombrando, por todos ellos Yo he muerto en la cruz ¿eh?; es decir, aquél que está diciendo algo en contra o no se ocupa… ¿cree o no cree que Yo he muerto por todos? ¿mmm?.

Sigo enumerando, los infradotados en general ¿qué condición social tienen?, ¿quién los tiene en cuenta?, incluso por ahí hay corrientes de científicos que quisieran destruirles porque son un peso para la sociedad. Despacio, porque si vamos a mirar todos aquellos que incluye el término de infradotados, también habría que destruir, de acuerdo a su forma de pensar, a montones que son infradotados del corazón y nunca han sabido amar a nadie, ni siquiera aquello que le pertenece, ¿entonces tenemos que destruir a todos?. Yo les hablé que en los países del tercer mundo en general un sesenta por ciento de las personas tiene serias deficiencias en su evolución mental ¿mmm?, entonces ¿qué?, esto nos lleva a replantearnos todo y Yo sigo allí en la cruz siendo testigo ¿eh? y diciéndoles a todos: sí, vine por todos, no se llamen a engaño.

Si quieren sigo enumerando, todas las minorías, todas las minorías de raza y a veces no tan minorías ¿no?, según la raza que se tenga es tan fácil vivir en cualquier país. No sé si judíos, no sé si gitanos, no sé si bolivianos, no sé si paraguayos, no sé si chilenos, pero ¿pueden estar en otros países tan fácilmente viviendo sin que nadie les haga daño o tengan que trabajar en forma clandestina?, cité algunos nada más ¿eh?, pero… cuánto me duele ¿no?. Dije también dentro de las minorías a los gitanos ¿mmm?, bien; también acuérdense de las minorías sexuales, los hombres tienen muchos derechos, pero este tema no puede ser tratado así como quien intercambia ignorancias, no, quien cree que Yo solamente vine para algunos están equivocados, Yo vine para todos.

Y otro dolor grande que consume Mis días, es una forma de decir es el tema, la realidad de los matrimonios de segunda unión, o tercera o cuarta, si ustedes esperan que Yo diga algo…, de posibles soluciones, no lo voy a hacer, la solución tiene que surgir de todo el amor que ustedes les tengan a aquellos que tal vez se equivocaron en la vida y llamados a vivir lo hicieron con otras personas y no con la inicial. Solamente quien está dentro sabe lo que es, porque ahora la situación ha cambiado un poco, pero hasta no hace muchos años ¿eh?, eran mirados como enfermos, leprosos, o algo por el estilo.

Podría seguir enumerando montones de personas que están en la cuneta de la vida ¿no?, los enfermos en todas las situaciones, de todas las enfermedades, ¿qué consideración social tienen?.

Aquellos que preparan a los que después van a sanar, ¿están realmente a la altura de la dignidad esencial de la persona humana?, no, muchos no y si hablo de los viejos, que Yo les llamo: adultos-adultos, no son también para muchísimos la resaca ¿mmm?, miren ustedes como les va a los adultos-adultos en este mundo. Y si bien los niños dicen ser la preocupación de la mayoría, porque el futuro es de ellos, ¿quién se encarga bien realmente de los niños? ¿mmm?, como ya dije en tantas oportunidades, a medida que crecen y pierden su ingenuidad natural se van metiendo en un mundo que los transforma y los hace cada día peores, a veces los padres unidos a la sociedad en general, a veces los que enseñan en todos los niveles, parecería que fuera un conjunto de seres que están predispuestos a confabularse en contra del hombre como persona, encuadrado dentro de un niño ¿eh?, o un adolescente o más también.

Como ven Mis queridos, parecería que está todo por hacerse, por allí aparece algún misionero en lejanas tierras africanas o una persona, aquí, o allá o en el otro lado, haciendo obras y los medios masivos de comunicación lo comentan como si fuera algo tan extraordinario y ¿no debería ser lo normal eso?. Ahora, cuando Yo antes usé el término los que están en la cuenta de la vida, Yo no me refiero solamente a los que ustedes piensan ¿no?, sino a todos marginados del amor, que son mayoría, no son justamente ninguna minoría.

Con este conjunto de dolores, cargados en Mi mochila de caminador constante, no es fácil transitar los caminos del mundo, es tan grande el peso que tengo, tan grande y a veces me parecería que aquellos que más tendrían que ocuparse es los que más dificultan la tarea, nadie se crea que está en este mundo privilegiado y que va a recibir Mi sangre gratuitamente, no, es una forma de decir por supuesto, Mi Misericordia alcanza para todo, pero Mis queridos, la de ustedes los hombres no alcanza, ni para todos, ni la mitad ni poquito siquiera.

Reflexionen largamente sobre esto, si a ustedes les gusta convivir con las infamias sigan así, si ustedes quieran ponerse de Mi lado y asumir Mi locura pónganse a trabajar seriamente para que todos sean mirados y todos sean contenidos en el Mensaje, “en el mandamiento nuevo que les di, que se amaran unos a otros como Yo los he amado”. No argumenten: por el tiempo las cosas mejorarán, Yo hace dos mil años que ando por ahí dando vueltas ¿no?, sin embargo no me entusiasman las cosas que veo, no y no es un reproche pero no digan estar dentro de Mí o de Mi bando, cuando en realidad no están ni dentro del bando de ustedes mismos.

Les guste o no lo que les digo, son Mis grandes dolores, por supuesto hay muchos más en Mi mochila, muchísimos más, como no me va a doler todas las interpretaciones extrañas y fantasiosas que hacen los hermanos separados, cómo no dolerme el papel que desempeña Mi Madre en ellos, en la consideración que tienen de Mi Madre. Bueno, algunos no la conocen pero ellos dicen conocerla, dicen, pero ya ven ustedes como están las cosas.

Mis queridos, otro día voy a seguir aumentando la cantidad de los dolores que me preocupan y me ocupan, de los dolores que mantienen una mueca de dolor en Mis labios y Mi Corazón como apretujado, sí, aquello de: “ámense unos a otros como Yo les he amado”, es una hermosa expresión que anda por ahí errando en los desiertos, en las zonas inhóspitas y por ahí logre encajar en algún ser, pero en general son excepciones.

Todo esto y mucho más está dentro de Mi mochila como un dolor permanente, no se llamen a engaño, aquellos que dicen trabajar por Mí y para Mí, no se llamen a engaño.

Amén.