Mensaje del 13 de Noviembre de 2002

Sigue siendo el 13 de Noviembre de 2002.

Habla Artemio:

Ven Señor Jesús, ven Señor, tan acostumbrados estamos a tus palabras de amor Señor, que cuando te demoras un momento, nuestro espíritu está como exaltado, esperando que vos aparezcas y digas tu palabra.

Ya está el Señor con nosotros.

Dice Jesús:

He observado con atención todo lo que ustedes estuvieron hablando y me parecía como un juego de niños y me encanta todo eso, porque Yo fui muy claro, si no se hacen como niños no van entrar en el Reino de los cielos.

Habla Artemio:

Señor Jesús, perdón por mirar el reloj.

Dice Jesús:

Muchas veces me pregunto: ¿por qué todavía no hay muchos que quieren escuchar Mi palabra? incluso dentro de este lugar, de este pueblo digo, les parecerá a lo mejor que Mi palabra es demasiado antigua, les parecerá que a lo mejor no es cierto, pero no nos engañemos, en las Homilías de los Domingos o de los días de semana, ¿quién escucha realmente?, ¿cuántos hay que se interesan por la palabra Mía?. Yo comprendo que no se puede sacar una costumbre de tantos años, pero la mayoría son de origen extranjero, en general y normalmente en los países de origen, era una costumbre bastante acentuada, leer la Sagrada Escritura, es decir escuchar la palabra y si se le entendía o no, no importa, pero se le escuchaba.

Nunca hay que descartar que en sí la palabra obre por sí misma en la mente de los hombres, pero también hay que pensar, hay que pensar en ir descubriendo cada día más. Siempre nos interesa conocer aquello que dice alguien que amamos, si no nos interesa tanto, es porque no le amamos tanto y convénzase que es así, por más que Yo mire las cosas en forma optimista, pero los hombres, a los hombres no les interesa prácticamente lo que Yo pueda decirles.

Fijate vos Mi querido, vos que anduviste siempre entre tanta gente, has visto, comprendido, que los seres humanos darían todo por un poquito de amor y cuántos hay que hasta pagan una caricia, hay formas y formas de pagar caricias, a veces muchos son amables con los demás para que los demás sean amables con ellos, eso son formas de pagar caricias, es decir una palabra amable es una caricia, entonces algunos se muestran amables para que los demás respondan de la misma forma; otros se muestran amables porque tienen miedo de los demás, porque saben que dentro de la sociedad en las que se mueven están los de arriba y los de abajo; los de arriba tienen el sartén por el mango y el mango también y los de abajo no tienen nada, entonces los de arriba, tal vez tengan un poco de temor que es lo que van encontrar en la Sagrada Escritura y los de abajo, creen que la Sagrada Escritura es solamente para los de arriba y no saben porque nadie se los dijo ¿no?, Yo viene especialmente para ellos.

Pónganse a pensar un poco, hace dos mil años, casi, que se escribieron de Mi muchas cosas, pero todas las cosas que dicen de Mi no fueron aprovechadas para amarse más sino para buscar más motivos a veces para pelearse, o hacer guerras o condenar a alguien. Cabría preguntarse: ¿hacia dónde van los hombres, hacia dónde?, ¿qué proyecto tienen en su vida?, ya sé que me van a argumentar de que el que está cansado y con penas, busca un lecho para acostarse y dormir, pero se le va pasando la vida y llega un momento en que la muerte llama a la puerta y el hombre se pregunta: ¿qué es esto? y tal vez en ese instante quisiera volverse atrás para hacer tantas cosas pero ya es tarde, por eso Yo en Mi mensaje anterior les dije con tanto cariño, con tanto amor, todo lo que les amo y al mismo tiempo me pregunto: todos aquellos que están resecos de afecto y tienen al alcance de su mano un montón de amor, entonces ¿qué es lo que pasa?, ¿qué es exactamente lo que pasa?

Yo estoy en todos lados, pero ahí en el Sagrario en cada Iglesia estoy, me gustaría ver que además de algunas personas comunes, estuviera el sacerdote también ahí haciéndome compañía, Yo sé que algunos argumentarán que no tienen tiempo, pero si me vieran a Mi, si estuvieran allí conmigo, el tiempo se multiplicaría y además aquella persona que entra en cualquier horario, tal vez se encuentre con el sacerdote delante del Sagrario, entonces podría intercambiarse una palabra y aunque no se dijera media palabra, ni siquiera media, pero si lo viera al sacerdote arder de amor delante de Mi, sería algo muy conmovedor y además contagioso como un virus, porque no es lo mismo encontrarse con la Iglesia desierta, por supuesto sabiendo que Yo estoy en el Sagrario, pero no es lo mismo encontrarse con la Iglesia desierta, que encontrase con el padre que está allí delante de Mi orando y además si supieran, que el padre iría a una hora determinada, pienso que muchos irían a esa hora para estar allí, pero incluso se mezquina en exponer el Santísimo, es mejor verme a Mi detrás de un cristal que en una urna cerrada, pero no.

Yo me pregunto: ¿qué represento en la vida de muchos?, Yo sé que hay en todos un tierno afecto, pero Mis queridos, no se puede esperar la muerte con mucha esperanza, cuando uno no tiene necesidad de ver al Padre cara a cara; entonces se piensa en los últimos tiempos como un castigo terrible, donde a uno ya se le terminan las cosas y va a quedar durmiendo, en lugar de pensar ese quedar durmiendo es justamente el momento en que comienza Mi vida verdadera. Cuando delante de un difunto se dice: que descanse en paz, se hace referencia a que esté delante de los ojos del Padre, que esté maravillado viendo la Luz del Padre, pero se cree que tal vez el que está allí, está como durmiendo un sueño largo que no termina nunca, cuánta incoherencia hay en los seres humanos, trabajan en la vida para ganar el cielo y después creen que están allí encerrados en una caja, donde el tiempo al pasar apenas si deja cenizas y Yo no hablo de algunos, son la mayoría, quiere decir que la mayoría no es feliz y eso me preocupa porque Mi voluntad es que sean felices ¿mmm?

¿Será posible Mis queridos?, será posible que en ese autoproyecto que muchos tienen razón pero lo van elaborando a medida que pasan los días, que en ese proyecto no esté si quiera un poquito de Luz, como la Luz que vieron en las flores, para ver la Luz dentro de esas flores tuvieron que tener ganas de ver la Luz, mientras que en la mayoría no tiene ganas y cualquiera se pregunta: ¿y ganas de qué tienen?,eso es lo que a veces Yo digo: ¿ganas de qué?. Como tantas veces dijimos: matan el tiempo con cositas para que el tiempo no los atormente eh... y uno ve que los esposos entre si, pasan el tiempo a veces sin hablarse siquiera, otros ni hablan con sus hijos, otros ni tienen en cuenta aquellos que le dieron la vida.

Vieron que hay como una especie de rechazo por la vejez, porque ese rechazo simboliza rechazar la muerte, porque el viejo habla más de muerte que una persona joven ¿no?, habla más en el sentido que su presencia arrugada y marchita, habla de una proximidad de la muerte, entonces allí está la explicación por qué los hijos, la mayoría de las veces, huyen de sus padres, no le prestan la atención que deben, no, tratan de llenarle de cosas para que tengan y lo que ellos buscan no es justamente cosas sino afecto pero hay una tendencia tremenda, en la mayoría, en detestar a los viejos y es una forma inconsciente de detestar la muerte, porque la muerte representa un montón de cosas feas para muchos, no es lo mismo pensar en la muerte y decir: voy a estar en la Luz del Padre para amarle eternamente y otra cosa es decir: voy a estar cerrado en una caja incómodo ahí, esperando quién sabe cuantos Siglos para el Juicio Final en que este cuerpo resucite; sinceramente aquel que piensa así que está cerrado en una caja, sinceramente me da mucho dolor porque debe ser muy triste la vida, muy terrible.

Entonces si el hombre no está allí en esa caja cerrado, ¿para qué vamos a visitarlos?, noo, es una buena costumbre, visitar los restos de aquellos que fueron y aquellos que estuvieron cerca nuestro y entonces se llevan flores, ¿por qué?, porque de por si la idea de muerte es triste y los colores son alegres, entonces quieren alegrar de alguna forma el lugar, pero tendrían que pensar en ese caso, que habría otras cosas para llevar también, tal vez objetos que hayan pertenecido a esas personas; pero hay una real confusión respecto a: ¿se está o no se está dentro de esa caja?, ¿estará en el cielo?, ¿dónde estará? y como al cielo se lo presentaron siempre lejano e inaccesible, entonces dirán: noo, estarán por ahí, tal vez en la oscuridad y muchos pensarán: quién sabe cual fue el destino del familiar equis.

Les digo todo esto para que reaccionen, para que reaccionen y puedan mirar la vida desde otro ángulo, más alegre, más optimista, más feliz, o ustedes qué creen, cuando llevan un muerto a enterrar que es una de las obras de Misericordia enterrar a los muertos, es decir una forma para que un cadáver no quede expuesto y cause dolor ver como se está desintegrando, pero tengan presente que en el cortejo fúnebre, el espíritu del que está dentro del cajón o de la caja, va también acompañando a su cuerpo, al dormitorio para dejarlo allí y todos creen que dejan ahí adentro al padre, a la madre, a los hijos, o los amigos, o lo que sean o dejan nada más que los resto de ellos, ¿por qué tanto llantos y cosas extrañas?, el que llora demasiado en un velorio o en un entierro, da a entender muchas cosas y una de las principales es, que Yo no estoy en la vida de ellos, porque sino pensarían de otra forma.

Ahora ¿y es tan importante que Yo esté en la vida de la gente?, bueno eso depende de la libertad de cada uno, no será hora Mis queridos de replantearse todo y el amor, los afectos en general, sea en la pareja, en los hijos, con los hijos, con los amigos, parientes, bienhechores, etc, no será hora ya, de preguntarse: ¿los amo de veras?, o hay ciertas relaciones con ellos que me incitan a conversar amablemente o lo que sea, ¿hay realmente amor por ellos? Tengo Mis dudas muy serias, quien se abraza a una caja diciendo: ¿por qué te quedas aquí mi amor, mi vida, mi luz de mis ojos?, ¿y quién dijo que se queda allí?, y el espíritu de ese ser ya está al lado de la persona que yo elija y tal vez le consuela por la situación, pero quien lo entiende, vayan ustedes a los velatorios y me van a decir.

Yo comprendo, Yo los comprendo que todo aquel que muere le causa dolor a los que tiene cerca, pero si, el dolor puede venir como una consecuencia de que se extraña a alguien que se amó, pero nada más, si yo amo de veras a alguien, sé que no muere, sino que está en un lugar mejor que el que estoy yo y que esos retos que quedaron en una caja no son nada más que restos que esperan el Juicio Final para la Resurrección. Claro, ¿para esto faltará milenios?, no se, pero mientras tanto, ustedes creen por ventura que los nietos, bisnietos, tataranietos, todos los descendientes, les va a importar algo el cuerpo de su antepasado, noo, irán a una fosa común. Si, todo esto es muy duro y muy difícil y sobre todo desconcertante, ¿por qué?, ¿porque no tener siempre cerca aquellos que uno amó y ama?

Se termina el cassette....................................