Mensaje del 30 de Mayo de 2007

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Tanta es la pena que siento cuando quiero entrar al corazón del hombre y el tremendo cascarón de egoísmo, odio, prejuicios, una seudo sabiduría que no es la que Yo pregono. Mensaje del 30 de Mayo de 2007

Habla Artemio:

30.

Dice Jesús:

Cuántas veces hablé de las desigualdades sociales, de las segregaciones, de los seres marginales, pero nadie se ocupa de todos ellos, es por eso que tantos vienen aquí porque se los atiende, se los escucha y se los mira con afecto.

No está muy lejano el día en que los hombres comprenderán que no están conmigo cuando han dejado afuera de su vida a todos los que padecen hambre y sed de justicia. Quien no escucha Mi palabra es duro y hasta cruel con sus hermanos, quien no escucha Mi palabra hace diferencias entre los seres humanos por el color de la piel, por su edad avanzada, por su sexo tal vez indefinido, por su raza, por su condición social, quien desprecia a cualquiera de Mis hermanos a Mí me desprecia, quien mira con ojos que juzgan las acciones de los hombres a Mi no me siguen, quienes se muestran altivos y soberbios me están repudiando, quien no está conmigo está en contra de Mí.

Estos principios no hace falta que Yo diga que deben ser aplicados por los que mandan en todos los órdenes, en todos, todos los órdenes. Tanta es la pena que siento cuando quiero entrar al corazón del hombre y el tremendo cascarón de egoísmo, odio, prejuicios, una seudo sabiduría que no es la que Yo pregono. Cuántas veces golpeo al corazón para que me abran pero el enorme cascarón que tiene no me deja entrar y el hombre tropieza, se cae, desde el Cielo mira al suelo y cuando tiene un poco de fuerza se vuelve a levantar para repetir lo mismo. Los animales no comen dos veces del alimento que les hace mal, los animales cuando segregan es por sus instintos pero muchas veces te has dado cuenta que los simples pájaros que cantan todo el día para Mí y para Mi Mamá cuidan a sus hijos, se esmeran por ellos hasta que sus hijos tengan vuelo propio. Alguien dirá: y sí, lo instintivo prevalece y ninguna madre abandona a sus hijos, en parte es cierto pero cuánta es la dignidad que tienen los animales, cuánta, viven dando, ofreciendo sin pedir nunca nada, se conforman con un mendrugo y si no lo hay hasta se alimentan con agua pero cuánta es su dignidad, cuánta.

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