Mensaje del 17 de Diciembre de 2007 (3º)

Sí, es cierto aquello de: ¿por qué me pegás?, decime qué te hice, ¿por qué me pegás?, ahora detrás del golpe, cuando el golpe se recibe con amor quien golpea no logra sus objetivos.

Mensaje del 17 de Diciembre de 2003

Dice Jesús:


Con mucha atención he oído todo lo que dijeron, aunque Yo ya lo sabía, pero me siento muy bien cuando les oigo a ustedes decir las cosas y decirlas con entusiasmo, con fervor, con alegría y vuelvo a decir lo que dije el otro día: “que estén contentos porque pueden hacer curaciones, expulsar a los demonios y tantas cosas más pero, sobre todo alégrense, porque vuestros nombres están escritos en los Cielos”.

Sí, es cierto aquello de: ¿por qué me pegás?, decime qué te hice, ¿por qué me pegás?, ahora detrás del golpe, cuando el golpe se recibe con amor quien golpea no logra sus objetivos, no los logra, pero golpea y en el momento del golpe parecería que ellos están logrando lo que quieren y tienen satisfacción por el golpe, pero ustedes están sobre y por encima de eso.

…(Se hace una pausa)…, repito que cuando no hablo así, estoy hablando pero en silencio, diciendo algunas cosas en privado.

No es tan simple describir el “romance” entre comillas ¿no?, que existe entre toda esta gente del grupo de oración y vos, conmigo y con Mi Mamá, porque es una relación que supera la comprensión de la mayoría de las personas, incluso de aquellos que uno cree que deberían tener la comprensión pero no. Y en esto no es cuestión de ni disgustarse, ni usar palabras fuertes ni nada, es una cuestión de hacerse pequeñito, muy chiquito, es decir muy humilde y pensar que uno tiene una tremenda necesidad de ver alguna manifestación de la Divinidad, en todo momento pero sobre todo en algunos momentos especiales.

Ahora: “bienaventurados los que ven y creen, pero más aún bienaventurados los que no ven y creen”, esto que parece ya una cosa repetida y lo es, pero no lo es tanto en el sentido de que todos los días uno está distinto.

Les amo profundamente y estoy tan conforme de ustedes, en todos los órdenes, dije todos los órdenes.

Dice la Virgen:

En este día digo más que nunca: “bienaventurados todos, porque lo que nunca han visto empezarán a ver”.

Además, vuelvan a ratificar todos los días aquella expresión Mía, cuando me visita el Arcángel: “he aquí la esclava del Señor, hágase en Mí según tu palabra”, díganlo al levantarse o en cualquier momento del día cuando lo sienten y es como decirle: sí nuevamente al Señor y porque no hacen nada más que ratificar aquello de que son creados a imagen y semejanza del Señor y en consecuencia, herederos de su Gloria.

Dice Santa Teresita:

Por todas las cosas que van a pasar yo estoy muy contenta y mañana, en el momento menos pensado voy a dejar una señal para que todos tengan mucha confianza y especialmente vos.

Dice Santa Faustina:

Siento mucha alegría porque muy pronto y más que lo que está ocurriendo, muy pronto los Mensajes de Jesús de la Misericordia llegarán a tantos y eso que cruzó por tu mente en el día de hoy, que no hace falta decirlo, será realidad. Por supuesto, que se los digo por experiencia, todavía hay mucho sufrimiento por delante, pero a esta altura ya eso deja de preocupar.

Dice la Madre Teresa:

Yo desde el primer día que vine acá siempre estuve implorando al Señor por todo y yo soy muy constante, por no decirlo de otra forma, pero lo que yo me propongo lo consigo, así decía en la Tierra y así digo aquí en el Cielo, no tanto como San José, que él en el Cielo más que decir algo manda, ordena, pero yo también ¿mmm?, asi que alégrense porque se acercan días muy lindos, bueno para ustedes son siempre días muy lindos pero más lindos todavía.

Dice Eduardo Pironio, Cardenal:

Celebro todo esto, celebro todo esto y cuando puedas volvé a Lujan, quiero sentir nuevamente el calor de tu cuerpo sobre la lápida que cubre mis huesos, no hay un tiempo determinado, ¿cuándo?…, cuando quieras y cuando puedas.

Dice Emiliano Tardiff:

Con qué palabras habrá que decir que yo fui el primero en, en forma oficial leer las Revelaciones que hizo el Señor siempre aquí y no encontré nunca en ninguna parte, ninguna palabra que se opusiera a nada de lo que es la Santa Madre Iglesia.

Dice el Padre Gabriel Guillén:


Ustedes todavía no tienen el ministerio de música, yo me voy a ocupar de eso, porque hice eso especialmente yo ¿se acuerdan que les dije? y que además está en mis libros, ya les voy a mostrar como les voy a formar el ministerio de música, ¿por qué?, no, no, todo está muy bien ¿eh?, todo está muy bien pero yo quiero que esté mejor todavía.

Y pensar mis queridos que yo he muerto a los treinta años, cuando tenía tantas ilusiones de hacer tantas cosas pero alguien se interpuso en mi camino y mi vida terminó, por eso cuando yo vi esto dije: en esto me anoto en forma inmediata.

Por ahora todavía no, pero hay una deuda pendiente ¿no es cierto?, vos tenés que escribir una biografía mía y vos habías pensado, porque yo te dije en Chile, de introducir la causa de Beatificación…, mirá, no es que yo tenga pretensiones de estar en los altares, pero vos sabés porqué, yo tenía cierto liderazgo dentro de la Renovación en el Espíritu, entonces por eso sí me gustaría ¿mmm?.

Dice el Padre Pío:

Buona notte, noo, voy a hablar en castellano porque después traigo problemas para que traduzcan ¿no?.

Ma, te extrañó ¿no? cuando aparecí allá el lunes a la mañana y te saqué el Rosario que vos tanto querías, pero ya te voy a mandar otro, no, te voy a mandar tres, el otro día te mandé un montón de fotos viste, lindas ¿eh?, hacé una copia de estas fotos y dale a los que la quieran tener sabes.

Yo diría que vos tenés que sacarte más fotos porque tenés tan pocas fotos, sacate fotos ¿eh?, haceme ese gusto.

Ese muchacho, lo estoy cuidando yo y la Mama Nostra lo está cuidando especialmente ¿eh?, después que vos lo fuiste a ver el lunes y vos no te acordas pero me pediste que te regalara algo, dentro de muy poco te lo doy, te va a parecer mentira pero te lo voy a dar.

Dice San José:

No es tan así como dijo la Madre Teresa, de que yo aquí ordeno, no, no, sí es cierto que crié al Hijo de Dios y Dios mismo y soy Patrono de muchas cosas, por eso me siento muy bien cuando me piden cosas para complacerlos y en esto que ocurrirá muy prontito…, pónganlo bajo mi especial protección y advocación todo esto, porque Jesús me lo dijo ¿eh?.

Dice San Martín de Porres:

Sí, sí, es un buen tiempo, pero tampoco es cuestión de tener demasiadas expectativas ¿eh?, las necesarias nada más. Yo también estoy alerta, yo también estoy intercediendo muy especialmente, porque me he tomado el compromiso de tener bajo mi responsabilidad el mundo Occidental y Emiliano Tardiff el mundo Occidental pero de los tiempos modernos.

Me gustaría que sumaran también a Santa Rosa, como alguien que se encarga mucho de ustedes, descúbranla, invóquenla, pidan su intersección, no se olviden.

Dice San Francisco de Asís:

Paz y bien, todo está muy bien pero va a llegar el momento en que van a tener que hacer como hice yo, cuando fui adonde vos sabés por algo muy especial.

Habla mi mamá:


Todo está muy bien, pero cuidado, siempre cuidado y por más que te merezcan toda la confianza del mundo, siempre reservá un poquito dentro, porque no hace falta que te lo diga pero, la prudencia es muy necesaria, muy necesaria. Pero partí siempre de una base, pase lo que pase, ocurra lo que ocurra, nunca tengas miedo, jamás y tomá a pecho con toda la fuerza que corresponde el ser…, el ser Celoso Custodio del Mensaje de Jesús, nunca sedas un centímetro de nada, porque esa expresión del Señor en boca de su Madre es muy grave, muy pesada, muy comprometedora.

No olvides nunca, ante cualquier palabra, ante cualquier cosa, ante cualquier situación, debés proceder como el Celoso Custodio de su Mensaje, tenelo muy en cuenta esto, porque tarde o temprano lo van a reconocer. Pero como Yo te enseñé, nunca te vendas a nadie, aunque estuvieras totalmente solo, que no va a pasar, pero nunca te vendas a nadie, porque la vida es corta y la eternidad muy larga, si los hombres tuvieran en cuenta esto tal vez obrarían de otra manera.

Toda la fuerza y toda la confianza, toda la valentía y toda la humildad, quiero seguir pensando muy bien de vos como lo hice siempre, tené en cuenta mis palabras, todos los demás te hablaron muy bien pero una madre siempre habla como madre, por más que los hijos estén muy grandes y crecidos, una madre siempre habla como madre.

Nunca te dejes sorprender, porque yo te voy a avisar antes siempre, cualquiera diría que te estoy sobreprotegiendo, justamente a vos, justamente a vos sobreprotegerte.

Y a mí hoy me toca decir…

Amén.

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos