Mensaje del 14 de Enero de 1998

Habla Artemio:

Jesús está con nosotros y vino acompañado por Maximiliano Kolbe, San Maximiliano Kolbe, está un poquito más atrás y su rostro es muy parecido al que vieron en la foto, Jesús esta vez vino como el Sagrado Corazón de Jesús, que está descalzo, se le ven los pies, pero los tiene lisos, se acerca al centro, me pone las manos sobre los hombros..., lo que tengas que decir Jesús, te estamos escuchando, si quieres hablar por medio de otra boca que no sea la mía hacelo Señor, y otra cosa te pido, no te vayas Señor te lo pido, no te vayas sin que algunos de los presentes también tenga la idea bien clara de que vos estuviste acá Señor porque mis hermanos me pueden querer mucho y creer totalmente en mi palabra pero también se les puede cruzar de que yo estoy delirando, entonces mostrala también a otros o al menos dale alguna señal a otro y el que la siente que lo diga para que todos los hermanos se enteren.

Dice Jesús:

Me parece bien ese razonamiento humano que vos hacés respecto a que me manifieste a otros también, no haría falta pero lo haré, ahora Yo les digo, no como una amonestación ni como un reto pero: ¿todos los que están presentes desean con toda su alma y todo su corazón verme?, si lo desearan con toda su alma y todo su corazón me verían igual que vos, así que es cuestión de desearlo hasta compulsivamente, es decir con una tremenda fuerza querer verme y les aclaro, no todos pueden aspirar a todos los dones y carismas porque Yo les regalo a cada uno, el que me parece que está bien que se lo regale para que puedan usarlo en beneficio de los otros, pero el carisma de las visiones, el carisma del don de lenguas, el carisma del amor en primer lugar, todos deberían desearlo con toda su alma y todo su corazón pero que yo sepa ustedes, en cuanto al carisma de lenguas, creo que no lo desean tener porque sino ya todos o casi todos hablarían en lenguas y lo de las visiones acuérdense que tienen que desearlo con toda vuestra alma y vuestro corazón y Yo no me negaré en mostrarme, que quede bien claro.

Acuérdense también que lo primero que hay que aspirar es al carisma del amor, hay que amar con toda el alma, todo y cuando digo todo, digo todo, pero por supuesto hay grados en ese amor, yo no puedo amar a una planta de yuyo, lo mismo que a un árbol frutal, así como no puedo amar de la misma forma a un árbol frutal que a un animal y así no puedo amar a un animal como debo amar al hombre, pero no por eso tengo que dejar de amar. Que quede bien claro esto que estoy diciendo, Yo no creo hablar con palabras oscuras o difíciles pero las cosas, muchas veces las digo, las vuelvo a decir y las repito porque es necesario para el ser humano repetir y repetir para que aprenda.

Bien, esto ha sido un poquito la introducción de lo que viene después, del Salmo que se leyó en la Sagrada Escritura puede sacarse mucho más jugo, por ejemplo todo el problema de cómo funciona la paz sobre los hombres no fue tocado porque habla del rey pacífico, habla del rey manso y humilde de corazón. Se tocaron algunos puntos pero sería importante hablar del triunfo que tiene asegurado todo aquél que es manso y humilde de corazón, sépanlo, grávenselo con fuego en vuestras mentes y vuestros corazones, la mansedumbre y la humildad son las condiciones esenciales que debe poseer todo aquél que se llama Mi discípulo, porque de esa manera con esas condiciones o virtudes entraron donde quieran, cuando quieran, como quieran, en el momento que quieran y ninguna puerta se cerrará porque nadie cierra la puerta al que golpea con mansedumbre y humildad, nadie, cuando digo puerta digo el corazón y el alma de los hermanos, hasta han visto que, repito, si hasta han visto que la mansedumbre, la humildad hasta aplicados con un animal o al transplantar una planta tiene o da sus muy buenos resultados. Todo lo que sea violencia, todo absolutamente todo genera algún problema de alguna naturaleza, ya sé que me dirán que hay ciertas cosas que tienen que pasar con violencia para que ocurran, como es el nacimiento de un niño por ejemplo. Ahora bien, Yo me pregunto si una mujer hace todos los ejercicios adecuados para que su niño nazca mejor es posible que su cerebro no sea comprimido en forma violenta como es comprimido y es posible que montones de personas que tienen deficiencias mentales se deba a que su nacimiento fuera con una violencia excesiva. Eso de que hay que llorar para llenar los pulmones de aire, aunque algunos medios dijeron a través del tiempo, son cuentos chinos, totalmente chinos sin ofender a los chinos.

El rey pacífico, el que hace las cosas con mansedumbre, bondad y humildad, ahí está la llave y el secreto para entrar en todos los corazones y en todas las almas, incluso de aquellos corazones más duros y empecinados, aquellas almas más recalcitrantes y endurecidos, incluso por la maldad y vos lo has comprobado por tus propios medios que hasta el mismo satanás reacciona de una manera distinta hasta cuando se lo trata con respeto, ojo, no quiere decir con decencia ni dejarle nada para él pero no tengo porqué hacerlo aún con malas palabras como las que él usa, vos lo has comprobado un montón de veces, que incluso el espíritu de las tinieblas tiene una actitud distinta cuando se lo trata con mansedumbre, humildad y bondad, pero con toda la firmeza que es necesario tratar al espíritu de las tinieblas; es decir, interpretar todo lo referente al rey pacífico de este Salmo de esta noche, con todas las implicancias que tiene, no se entusiasmen con pensar que una palabra fuerte o una acción violenta o más o menos violenta puede remediar a algo, no, no remedia nada, ninguna cosa hay superior a la ley del amor, a la ley de mansedumbre, a la ley de la humildad y a la ley de la bondad, nada superior.

Ponerlo en práctica en cada cosa, a cada momento, en todos los instantes y a través del tiempo y van a ver los resultados, todo esto que acaban de oír es palabra de Dios.

Amén.