Mensaje del 7 de mayo de 1996

Dice Jesús:

Vendré siempre a visitarlos porque me siento complacido por todos y les hago una recomendación especial. Nunca dejen de rezar el Padrenuestro.

¿Saben que la oración que más le gusta a mi Madre es el Ave María y después el Magnificat?

Si este pueblo pudiera ver, vería salir rayos de toda la casa, verían ríos de mi sangre correr por sus calles.

Viven en medio de un montón de problemas porque no quieren que se reúnan… Algún día todo se va arreglar.

 

Hijos míos más fe, más fe, más fe.

Aquí adentro en las personas que están la gracia sobreabunda.

Cuando vayan a su casa tengan confianza que mi misericordia los ha tocado.

Me gustaría que en la próxima reunión, lean un mensaje de la Virgen Maria de lo que dice en Yugoslavia.

Encomiéndese al Inmaculado Corazón y encomienden a otros.

Benditos sean hijos míos porque todos están brillando como si fueran un sol.