Siento Mi Corazón tan desolado porque Mis ojos estuvieron mirando como lo hago siempre, muertes en todas las partes del mundo
Y saben que a veces me detengo en Pedro y recuerdo aquellas palabras: “¿me amás Pedro?, cuidá Mis ovejas”
Como me gustaría que todo el conjunto de Gracias de Mi Misericordia llegara a todos los hombres del mundo, pero Mi preocupación es mayor para todos aquellos que están desprovistos de todo.
Mis queridos, hombres de todas las latitudes, sobre todos aquellos que detentan el poder, en todas las esferas de la vida social, ¿han tomado conciencia, real y concreta, de cómo deben usar el poder?.
¿Por qué no dejar que hable el Espíritu Santo en vuestros corazones?.
Cuando veo en Mis largas caminatas por el mundo y por las conciencias de los hombres y por los intereses y cualidades de ellos hay ejemplos maravillosos, pero no veo que en los medios masivos de comunicación se exalte a aquellos profesionales realmente que tienen una vocación de servicio.
Por supuesto que nos estamos manejando con un terreno muy… no difícil pero sí sujeto a decir nuestro parecer en vez de lo que dice el Espíritu, por eso siempre el Espíritu debe estar acompañado de muchas virtudes sobre todo la madre de todas que es la humildad.