Mensaje del 04 de Marzo de 2003

¿Qué pasa mañana, pasado, dentro de un momento?, todo está en Mi manos, dejen, ustedes no piensen, amen simplemente, amen al prójimo por supuesto, ámenme a Mi como Yo los amo.

Mensaje del 04 de Marzo de 2003

Habla Artemio:

Hoy es 04 de Marzo de 2003.

Dice Jesús:

“No teman que siempre he vencido las tinieblas, no teman porque el que cree en Mi nunca se perderá, nunca”.

Todos están viviendo acontecimientos de una tremenda relevancia, ahora por el año litúrgico, por todas las cosa que pasan, por todas las cosas que pasan a nivel personal, pero más allá de todo eso traten de vivir espontáneamente, sin darle a las cosas mucha importancia, déjense llevar, así como un peregrino va caminando sin alterar el ritmo de su marcha, sí, déjense llevar ustedes también, déjense llevar. ¿Qué pasa mañana, pasado, dentro de un momento?, todo está en Mi manos, dejen, ustedes no piensen, amen simplemente, amen al prójimo por supuesto, ámenme a Mi como Yo los amo, pero tengan en cuenta que también deben amarse a ustedes, tienen que amarse ustedes así mismos, porque cuando toman conciencia de vuestro cuerpo o de vuestra imagen en el espejo, digan: soy una creatura del Señor y en consecuencia yo no puedo mirarme mal, despreciarme o lo que sea; de ahí que todos aquellos que desprecian a las creaturas del Señor…, no les puede ir bien.

No hay ningún fin que justifique en despreciar a nadie, menos a los que tenemos cerca, pero a nadie, porque todos son creaturas del Señor y entonces estamos siempre mirando, tocando cosas sagradas. Tengamos cuidado con todo esto porque a veces uno tiene la tentación de pensar mal de este, o del otro, dejen que Yo me encargue de los errores de las personas, si ellos quieren que Yo me encargue, pero no, no se ocupen ustedes, hablo así en general porque…, cualquier cosa que pase en los hermanos por algo ocurren.

Dice Nuestra Madre, la Virgen:

Y pensar que a través de los Siglos y en tantos lugares de la Tierra y aquí también, siempre pidiendo, siempre pidiendo por el respeto al hombre, por el amor al hombre, todo, pero son lerdos todos de no oír y algunos directamente no oyen, pero ustedes sigan viviendo y haciendo realmente como el Señor les inspira y les da fuerza. Más allá de todo, el cristiano es el ser que acomodó tan bien su vida como para que cualquier cosa encaje en el plan del Señor; entonces dirán ustedes: ¿para qué sufrir?, ¿para qué los dolores?, ¿para qué?, ¿para qué?, ¿para qué?, es cierto, cuando tienen un dolor entre manos, cuando ven que las fuerzas se terminan, cuando ven que uno no da más…, caigan en Mis brazos y en los brazos de Mi Hijo, como quien dice: aquí estoy, y las cosas ya así las tengo resuelta.

No es fácil caer en Mis brazos y en los de Mi Hijo, pero es el único camino que tienen para vivir bien y ser felices y continuar, estar siempre preparado para todo, lo bueno y lo malo, porque nadie sabe que pasa dentro de un rato, pero si están fuertemente en Mis brazos y en los de Mi Hijo no hay ningún tipo de temor, ¿cuándo aparece el temor?, cuando no se cree plenamente en Mi y en Mi Hijo, sino no aparece nunca el temor, no.

Así con toda la sencillez y espontaneidad, cada mañana digan lo que Yo dije en aquél momento: “he aquí la esclava del Señor hágase en Mi según su palabra”, y después…, el después tiene que estar en nuestras manos, es la única forma de vivir, dejar el después en nuestras manos y el mientras tanto… también.

Está demás que les diga que los amo mucho, que tengo por ustedes un cariño muy especial, ahora y siempre, nunca puede dejar de pensar en lo mismo, nunca. Háganse niños, así es más fácil estar en Mis brazos, háganse niñitos ¿mmm?.

Amén.