Todo esto ya lo he dicho en otras oportunidades creo, de otra manera, de otra forma, con otras palabras, pero tenías razón cuando hoy dijiste: que hoy se iban a decir cosas muy grandes, pues bien, cada una de las palabras que he dicho hoy, para todos: quien tiene ojos para ver que vea y los que tienen oídos para oír que oigan. ¿Hay mucho tiempo?, el tiempo necesario que se permite cada ser para tomarse a pecho la justicia que debe prevalecer entre los hombres, sino no hay, si no hay esa actitud interior de servir a la justicia con amor, entonces todavía falta una eternidad, pero si están de acuerdo en que podrán ver la justicia cuando se reviste del amor, entonces todo está muy cerca, ese es el deseo del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Dios Trino y uno.