Mensaje del 25 de Mayo de 1999

Todo lo que se hace por amor no se siente o se siente menos, cuando ves las llagas de Mi cuerpo, las visibles por lo menos pero sabés las que están debajo de la túnica y pensás en todos los que están sufriendo, en todos los que padecen injusticias, en todos aquellos que siempre han sido marginados de todo, por eso estas llagas deben seguir sangrando y Yo te invito a vos y a todos aquellos que escuchan a que sumen sus dolores a estas llagas, es un dolor lacerante, continuo, no se detiene, ese es el gran secreto del amor, el sufrir por los demás, aunque la mayoría de las veces los demás ni se enteran, ni lo saben, ni lo valoran y hasta lo desprecian, esa es la enorme paradoja de ser cristiano.


Mensaje del 25 de Mayo de 1999

Habla Artemio:

Desde ya un rato Jesús está acá.

Señor, hace dos mil años Señor que esas llagas están siempre vivas, cuánto dolor Señor, cuánto dolor Señor. Te escuchamos Señor qué es lo que querés decirnos.

Dice Jesús:

Todo lo que se hace por amor no se siente o se siente menos, cuando ves las llagas de Mi cuerpo, las visibles por lo menos pero sabés las que están debajo de la túnica y pensás en todos los que están sufriendo, en todos los que padecen injusticias, en todos aquellos que siempre han sido marginados de todo, por eso estas llagas deben seguir sangrando y Yo te invito a vos y a todos aquellos que escuchan a que sumen sus dolores a estas llagas, es un dolor lacerante, continuo, no se detiene, ese es el gran secreto del amor, el sufrir por los demás, aunque la mayoría de las veces los demás ni se enteran, ni lo saben, ni lo valoran y hasta lo desprecian, esa es la enorme paradoja de ser cristiano.

Alguien podría decirles: ¿por qué siguen a este hombre Dios que les produce sufrimientos y que les invita a llevar la cruz que Él lleva, por qué siguen a este hombre?, la respuesta es de ustedes, pero si están aquí delante de Mí es por algo, es porque han visto que en el manar sangre de Mis heridas estoy manifestado Mi amor por todos los hombres, de todos los tiempos, de los tiempos que vendrán. Mi sufrimiento es más psíquico que físico porque por Mi mente pasan todos los horrores que hay sobre la Tierra, Mi cuerpo tiene alguna vez sosiego pero Mi mente no. Piensen en todos los dolores que hay sobre la Tierra y que de una u otra forma lo estoy pagando, pagando y pagando por todos, ahí está el secreto del amor, ¿quién entiende el verdadero amor?, son tan pocos, pero no es que Yo por ese motivo les prometa la Luz del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo por toda una eternidad, sino ustedes saben muy bien que al sufrir por los demás se acrecienta vuestro amor y sienten que vuestra vida tiene sentido y está justificada. A pesar de los dolores que hay en ustedes y de los sufrimientos que padecen y de las cruces que tienen que llevar ¿cambiarían todo eso por aquél que parece estar contento y feliz pero al margen de todo este amor?, ¿cambiarían Mis queridos todo eso?, no lo cambiarían, puede que en algún momento se revelen y digan: por qué tanto Señor, y tienen razón, ¿acaso Mi naturaleza humana no le pidió a Mi Padre también: “aparte de Mi este cáliz, pero en todo caso que se haga tu voluntad”?.

Cuando en el momento del dolor el grito surge desde el fondo de vuestras entrañas no hacen nada más que hacer lo que hice Yo pidiéndole a Mi Padre que apartara el cáliz de Mí, cómo no los voy a entender, comprender y a justificar Mis queridos, cómo no los voy a comprender, cómo no los voy a comprender, para eso el Padre me regaló la naturaleza humana porque de esa forma comprendería hasta las cosas más mínimas que padecen ustedes y si comprendo hasta las cosas más mínimas que padecen ustedes cómo no voy a derramar sobre todos Mi inmensa Misericordia, cómo no lo haría.

Es por eso que traten de contagiar este amor doloroso que sienten, este amor que para los demás es un amor triste, traten de contagiarlo porque es el único verdadero, hasta en los amores humanos siempre están los ojos con lágrimas, hasta en los amores humanos, cómo no lo van a estar cuando tratan de imitar de alguna forma Mi vida, como dice hoy la palabra, han visto que desde el comienzo hasta el final hay una ilación completa de todo, entonces piensen, que nada de vuestra vida escapa a Mi entendimiento y que esto los haga felices porque quién sabe qué va a pasar mañana pero Yo sí lo sé y si estoy dentro de vuestro corazón qué podrían temer, en algún momento sí es natural y lógico pero después ya no. Mis queridos, cuánta gracia y Misericordia llenó este recinto vuestros corazones y vuestra vida esta noche, cuanta gracia Mis queridos, cuánta gracia.

No importa que no tengan conciencia de todo eso porque al tenerla, al tenerla ya tendrían la madurez para estar directamente conmigo en la Casa del Padre, por eso toman a esa imagen Mía que se ha coloreado, la toman con naturalidad, como algo común y tengan siempre el ojo atento porque los prodigios se multiplicarán día tras día, mientras tanto será privilegio de unos pocos verlo pero lentamente llegará a otros, pero aunque otros no lo vean las gracias secretamente llegan a las almas, detrás de ese pequeño color que hay en Mi imagen he derramado tantas bendiciones, tantas pero tantas bendiciones sobre ustedes y sobre tantos que ni por casualidad lo saben, incluso aquellos que le quieren mal, pero no olviden que las cosas amargas de tanto ponerle azúcar terminan por volverse dulces.

Dice Nuestra Señora:

Al verme tan grande antes como Nuestra Señora de San Nicolás, hasta te asustase un poco pero me has desobedecido Mi querido, vos estabas danzando como el rey David y Yo te pedí siquiera sacá una prenda de tu cuerpo, aunque él bailaba desnudo pero no es problema eso, era algo simbólico nada más, como un ofrecimiento. La llama de amor que sale de Mi Corazón está quemando todo y quiéranlo o no vuestras manos y vuestra mirada bendicen todo aquello que tocan y que miran, aunque ustedes no tengan el propósito de hacerlo, esa es la Economía Divina como aquél que lleva un perfume y no siente su aroma así ustedes vayan donde vayan llevan el aroma de la gracia del Señor sin darse cuenta que lo hacen porque piensen que sería imposible después de estar cerca y teniendo tanta gracia sobre ustedes al irse de aquí quedarían sin ella, no, ustedes no lo ven pero brillan como un sol, quiéranlo o no, se acuerden o no, les guste o no, les de temor o no pero todo lo que tocan y que miran será especialmente bendecido.

Amén.